La Asociación Civil mantiene la preocupación por el aumento de este tipo de delitos en contexto de pandemia y la consecuente ralentización de los procesos judiciales. Desde su conformación acompañaron 250 casos de Olavarría y la zona, muchos de ellos llevan años sin justicia y con los acusados circulando libremente por la ciudad. Desde esta semana, tras un arduo proceso, tendrá una sede otorgada por el Municipio.
Animate es una asociación civil de la ciudad de Olavarría conformada en 2016. Liliana Cuenca es una de las integrantes y relata que, al igual que muchas otras organizaciones que tienen el mismo fin, su creación estuvo directamente relacionada con un caso de abuso sexual muy cercano a ella. Donde no hay justicia nacen las redes de contención. Su familia se encontró con la instancia de un juicio en sus narices sin saber qué era ni cómo proceder. Desde ese momento comenzaron los “paseos” por fiscalías y juzgados. “Así nos fuimos haciendo, aprendimos en la lucha”, cuenta Liliana, y afirma que eso les dio el recorrido suficiente para organizarse y ser el sostén de otrxs.
Según los datos brindados por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, los llamados a la línea 137 por violencias intrafamiliares y/o sexuales aumentaron en un 20 por ciento durante el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, respecto al mismo período del año 2019. Asimismo, según las estadísticas de la Fiscalía General de Azul, entre el 11 de marzo y el 16 de septiembre de 2020 en Olavarría se registraron 30 denuncias por abuso simple, 5 agravados, 6 con acceso carnal, 6 con acceso carnal agravado, 2 gravemente ultrajante, un estupro, 8 por exhibiciones obscenas y 3 casos de grooming. De esta información no puede deducirse que los delitos contra la integridad sexual hayan aumentado en la ciudad durante el Aislamientos Social, Preventivo y Obligatorio, ya que la mayoría de estas denuncias hacen referencia a hechos ocurridos varios años atrás.
Desde que comenzó la pandemia son muchas las problemáticas que se desprenden. En primer lugar, se profundiza la lentitud de los procesos judiciales, sobre todo en las instancias de la cámara gesell, suspendidas durante varios meses, ya que son actos que implican la movilidad de varias personas, sumado a la falta de infraestructura para llevarlas adelante. Liliana aporta el dato de que hay casos de 2011 o 2012 que aún no tienen fecha de juicio, por lo tanto eso se traduce en que el acusado sigue circulando libremente por la ciudad, llevando una vida normal, con la posibilidad de cruzarse con la víctima.
En ese sentido, hay un caso particular que a las integrantes de Animate les llama la atención. Tiene que ver con la rapidez con la que son imputadxs lxs acusadxs cuando se trata de personas que tienen cierta exposición para la vida local, mientras hay causas que están a la espera de una respuesta desde hace 5 o 6 años. “Hay chicas que tienen 13 actas, es decir, que 13 veces consultaron el estado de su causa y no se movió un milímetro. Necesitamos que se tomen en serio las denuncias, que no haya diferenciación en cuanto a la gravedad del caso porque el daño psicológico es igual de grande. Menos aún, que una denuncia sea atendida rápidamente por ser un caso conocido en la ciudad”, cuenta Liliana a Feminacida.
Reconocen que desde la creación de la Ayudantía Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual, a cargo del fiscal José Iturralde, han notado grandes mejoras. En primer lugar, que haya un solo fiscal que reciba e investigue este tipo de delitos y que, además, le hayan asignado personal que trabaja a la par. También notaron una pequeña aceleración de las causas, aunque siguen sosteniendo que los tiempos de la justicia no son los mismos que los de las víctimas.
Crédito: El popular medios
Sobran los testimonios de destrato por parte del personal policial, jueces, médicxs, funcionarixs, entre otros actores que involucran al circuito de la denuncia que se resisten a ser interpeladxs. Hay que terminar con los discursos que intentan darles la responsabilidad de encontrar soluciones a quienes deben ser acopañadxs. “‘¿Para qué vas a denunciar un abuso?’, ‘Pasó un montón de tiempo, no tiene sentido que denuncies’. Nos cansamos de escuchar esas frases, nos cansamos de que las instituciones no nos den las respuestas que necesitamos. Ahora la que denuncia soy yo”, dice Liliana dejando entrever la firmeza con la que se planta en la comisaría de la mujer para no permitir que ninguna persona más atraviese ese trato violento. Pero sabe muy bien que eso tiene que ver con su presencia y con la lucha que llevan adelante desde la organización.
Animate tiene intenciones de conformar su propio equipo interdisciplinario ya que la orientación en el camino judicial no es la única demanda que tienen. Desde el comienzo de la pandemia también se han intensificado las consultas para solicitar acompañamiento psicológico con la intención de fortalecerse y poder alcanzar ese punto de llegada que es la palabra, el testimonio. Por el momento tienen muy buena respuesta de parte del área de salud mental del Hospital Municipal a cargo de la Licenciada Mariana Galli, quien les allana muchísimo el camino. La pregunta es: ¿qué pasaría si no existieran este tipo de organizaciones? Las experiencias colectivas de organización y las redes entre mujeres y disidencias siempre están para responder; llegan donde el Estado no está o elige no hacerlo.
Desde su creación vienen peleando por una sede y por recursos económicos que les faciliten su inmenso trabajo, que finalmente fue facilitada esta semana. Liliana cuenta que muchas veces realizaba entrevistas en el living de su casa, en la vía pública o incluso dentro de un auto, con la exposición que eso implica y sin contar con la privacidad que amerita.
El 12 de octubre de 2017 Animate había pedido una audiencia con el intendente Ezequiel Galli con la intención de ponerlo en conocimiento de su trabajo y contar con el respaldo del municipio pero no obtuvieron respuesta. Durante ese mismo año, a través de la Dirección de Políticas de Género consiguieron cuatro vales de nafta y una ayuda de 12.000 pesos por cinco meses, medida que no fue renovada desde entonces.
El día 1 de abril de 2019 realizaron el segundo intento, en este caso dirigiéndose a la Secretaría de Desarrollo Humano y Calidad de Vida a cargo de Diego Robbiani. En esa ocasión fueron recibidas y les facilitaron el trámite de Entidad de Bien Público. Por su parte, el entonces bloque Unidad Ciudadana del Concejo Deliberante también se expresó al respecto solicitando al Ejecutivo Municipal lo ya mencionado. Finalmente, el 13 de agosto de este año el interbloque del Frente de Todos presentó un proyecto de resolución reiterando el pedido. El expediente fue aprobado por unanimidad por los ediles.
Finalmente, la semana pasada sus integrantes fueron recibidas por los funcionarios Diego Robbiani y Dolores Muro. Ahora empezaron a trabajar en una oficina en la sede de la Dirección de Políticas de Integración para la Discapacidad.
La lucha continúa
Las integrantes de Animate siguen en alerta, sobre todo poniendo el ojo en los casos de abuso en las infancias teniendo en cuenta que hay escuelas, clubes y otras instituciones cerradas que siempre fueron lugares de detección y prevención. Sostienen con seguridad que para muchas personas es liberador que el acusado tenga la condena, pero también saben que la cárcel no previene las violencias y los abusos; la educación y los cambios culturales sí.
El sostenimiento entre ellas también es fundamental. Nadia, hija de Liliana, es psicopedagoga y forma parte del grupo. Aporta su conocimiento profesional y dice que hay que endurecerse un poco: “Es algo que se aprende. Se tiene que poner cierta distancia porque sino te termina afectando. Para ayudar al otro tenés que acompañarlo y sostenerlo, no podés desesperarte con esa persona”, reflexiona. Una es sostén de la otra para que nunca más haya impunidad.
Como dice Luciana Peker en su libro La revolución de las hijas: “Faltan lugares y políticas para que las amigas, familiares, vecinas puedan ser más efectivas en la contención hacia quienes sufren abuso o maltrato porque, en la mayoría de los casos, se oxidan de impotencia o de falta de herramientas concretas para que las soga no se corte”.
Para ponerte en contacto con Animate podés escribirles a su página de Facebook o comunicarte al 2284-571543. También podés acercarte para colaborar con la campaña de socios que lanzaron recientemente por un valor mensual de $100.
Ayudantía Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual. Titular: Dr. José Iturralde, Tel: 2284-585613. Correo: afdis.az.ol@mpba.gov.ar. Para realizar denuncias https://seguridad.gba.gob.ar
Correo electrónico de la Fiscalía General de Azul: denunciasazul@mpba.gov.ar
– Este artículo fue producido en el marco del Taller de Producción y Edición Feminista en Medios Digitales de Feminacida –